Quiñones cree que administraciones y motoristas tienen que “trabajar unidos para aminorar la siniestralidad” de este colectivo

22/11/2021

La delegada del Gobierno en Cantabria participa en la concentración en la entrada de la Delegación por el Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Accidentes de Tráfico


La delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, cree que todas las administraciones públicas y los usuarios de la moto tienen que “trabajar unidos para aminorar la altísima siniestralidad” que afecta a este colectivo en el conjunto del país y también en Cantabria, donde en lo que llevamos de 2021 han fallecido siete motoristas en accidentes de tráfico.

Quiñones así lo ha señalado este lunes tras la concentración celebrada en la entrada de la Delegación del Gobierno con motivo del Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Accidentes de Tráfico, que se conmemora el tercer domingo del mes de noviembre, y ha apostado por continuar intensificando las campañas de sensibilización para seguir reduciendo el número de víctimas de accidentes de tráfico pero especialmente las dirigidas a los usuarios de la moto.

El lema de este año para conmemorar el Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Accidentes de Tráfico es ‘Recuerda, apoya, actúa’  y pone el foco en la reducción de la velocidad del tráfico: velocidades bajas, que tienen el potencial de prevenir muchas muertes y lesiones graves, en particular las de peatones y todos los demás usuarios vulnerables de la carretera: niños, ancianos y personas con discapacidad.

La delegada del Gobierno ha detallado que, hasta este 22 de noviembre, han fallecido en las carreteras cántabras 10 personas en accidentes de tráfico y 7 de ellas eran motoristas Y hasta mediados de noviembre de 2021, se han registrado en Cantabria 797 accidentes con víctimas que, además de los fallecidos, han causado 98 heridos con hospitalización y 984 leves, ha indicado.

En la concentración ha participado el jefe provincial de Tráfico, José Miguel Tolosa, que ha detallado alguna de las últimas campañas llevadas a cabo con el fin de sensibilizar y concienciar a la sociedad cántabra sobre materias tan importantes como el alcohol y las drogas, uso de motocicletas, distracciones en la conducción o correcto estado de los neumáticos.

También ha citado la instalación esta pasada primavera de la señalización específica de peligro para motocicletas en tres zonas concretas de Cantabria donde se han producido un número importante de siniestros con este tipo de vehículos en los últimos años.

También han asistido el comandante del Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Cantabria, Rubén Flores; el jefe de la Demarcación de Carreteras del estado en Cantabria, Fernando Hernández Alastuey; representantes del 112 y el 061, de varias Policías Locales, de ayuntamientos, del Gobierno autonómico, de la Fiscalía de Seguridad Vial, de asociaciones profesionales y, por supuesto, miembros de las entidades de familiares y víctimas de accidentes de tráfico.

Así, han participado en la concentración las asociaciones AVATA, NUBA, Stop Accidentes, Unidad de Atención a Víctimas de Tráfico de Santa Clotilde, Moto-enlaces y entidades colaboradoras en educación vial.

MANIFIESTO POR EL DÍA MUNDIAL

En la concentración se ha guardado un minuto de silencio y se ha dado lectura al Manifiesto por el Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Accidentes de Tráfico, un momento que ha sido emotivo ya que lo ha leído la viuda del motorista que falleció el pasado 4 de septiembre en un accidente en el Alto de La Braguía y que formaba parte de la organización de la Vuelta Ciclista a Cantabria.

En el manifiesto, se ha recordado que cada año mueren en el mundo aproximadamente 1,3 millones de personas víctimas de los accidentes de tráfico, y entre 20 y 50 millones de personas resultan heridas de distinta consideración. Y, además, casi la mitad de defunciones afectan a «usuarios vulnerables de la vía pública», es decir, peatones, ciclistas y motociclistas.

Asimismo, se ha advertido de que, si no se aplican firmes medidas para evitarlo, se prevé que para 2030 los accidentes de tráfico serán la séptima causa de defunción.

Además de recordar a las víctimas y a sus familiares que son los que conocen el sufrimiento y las dificultades que los siniestros viales provocan, se ha reconocido la labor de las asociaciones de víctimas en los ámbitos de la prevención, concienciación, atención y reinserción de las personas afectadas por la violencia vial.

También se ha destacado la dedicación de los agentes de tráfico, de Guardia Civil y las Policías locales, de los miembros de los servicios de auxilio y emergencia y de los responsables del mantenimiento y conservación de nuestras calles y carreteras.

Por último, se ha expresado el compromiso de toda la sociedad española y, particularmente, de administraciones, organizaciones y empresas para atender con justicia y sensibilidad a las víctimas, para luchar contra los comportamientos incívicos y para trabajar junto por la seguridad vial.